Javier Humberto Arias Sánchez
“Cuando los días de visita me presentan a sus familiares con orgullo o cuando después de haber salido me llaman a saludarme con aprecio, aunque aparentemente sean cosas pequeñas, a mí me llenan de enorme satisfacción”.
Su función principal al frente de la Dirección del Centro de Rehabilitación Masculino El Bosque es la custodia ordenada por los diferentes juzgados, de personas sindicadas de delitos.
Es de resaltar la búsqueda de la resocialización de estas personas de una forma espiritual, psicológica, académica y laboral.
Nuestro propósito es procurar que los internos salgan de aquí siendo mejores personas, dice.
Y aunque Javier Arias Sánchez, coronel (r) de la Policía Nacional, es consciente de la complejidad de trabajar con personas que están obligadas a permanecer en ese lugar, su liderazgo y su capacidad para motivar a los internos, han sido prendas de garantía para alcanzar sus propósitos en los procesos de reeducación y de reinserción social.
A la alcaldía se vinculó en enero de 2016 en calidad de coordinador del Observatorio de Criminalidad y Violencia y en el centro de rehabilitación, adscrito a la Secretaría Distrital de Gobierno, se desempeña desde agosto de 2018.
Su día comienza a las 6 de la mañana, cuando se reciben las novedades de la noche y de los vigilantes que entran en servicio.
Al llegar a la cárcel se pasa revista de los planes y programas que están diseñados para la jornada, y se dialoga con el personal de internos, saber escucharlos es una parte importante en el proceso, dice.
Tan pronto asumió la dirección, el coronel Arias adelantó las gestiones correspondientes con el SENA y los resultados de esa gestión están a la vista: “Actualmente manejamos más de 3 capacitaciones en diferentes artes, que ni por la pandemia se dejaron de difundir. Se está alfabetizando a un grupo importante de internos en colegios del distrito y tenemos un centro de lectura; proyectos productivos de huerta agrícola, galpón de gallinas ponedoras, así como reciclaje, carpintería, y taller de ornamentación”, comenta con satisfacción.
Asegura que lo más gratificante es ver que, pese a las dificultades por las que están atravesando, en su mayoría los 360 internos son personas alegres, que desean salir adelante. “Cuando los días de visita me presentan a sus familiares con orgullo o cuando después de haber salido me llaman a saludarme con aprecio, aunque aparentemente sean cosas pequeñas, a mí me llenan de enorme satisfacción”, comenta el funcionario.
Para Javier Humberto Arias la mayor inquietud es la atención oportuna en el sistema de salud, especialmente para las personas con enfermedades de base como diabetes e hipertensión. Igualmente, la atención especializada para extranjeros que no están en el sistema de salud. Estos son aspectos de los que siempre está muy atento, para agilizar los trámites, junto con su equipo de trabajo.
El coronel Arias Sánchez es administrador policial de la Escuela de Cadetes General Santander, se especializó en Seguridad en el Centro de Estudios Superiores de la Policía, cuenta con una maestría en Seguridad ciudadana y, además, es administrador de empresas de la Universidad Cooperativa de Colombia, y Contador Público de la Universidad San Martín.
La disciplina es la cualidad que más aprecia en los demás y la soberbia es algo que no soporta, a pesar de ser un hombre con un elevado nivel de tolerancia.
Su tiempo libre en familia transcurre en compañía de su esposa y de sus dos hijos, en una pequeña finca en Baranoa, en esa búsqueda eterna de todos: los momentos de felicidad.
Javier responde:
Aficiones…
Fútbol y ahora ciclismo.
Tu mejor recuerdo…
El nacimiento de hijos.
Tu plato predilecto…
Asados.
Un postre…
Tiramisú.
Tu color preferido…
Azul.
La satisfacción más grande…
Servir.
Tu mayor reto logrado…
Hacer viable la cárcel distrital.
Tu próxima meta…
Certificarla.
Una palabra para definir tu vida…
Agradecido de Dios.
Una asignatura pendiente…
La finca.
Un libro…
La Biblia.
Una película…
Gladiador.
Una canción…
La ciudad de la furia – Soda Stereo.
Un lugar…
Barranquilla.