Barranquilla se vuelca a las energías renovables
En la capital atlanticense ya se están haciendo los cambios de energías para seguir trabajando por esta Biodiverciudad.
La Barranquilla que se planea hacia 2100 que presentó el alcalde Jaime Pumarejo Heins no es un sueño lejano, porque ya inició: en la capital del Atlántico ya se está ejecutando el primero de los siete hitos emblemáticos que conforman la visión colectiva de ciudad a partir del uso de energías renovables, un proyecto que contempla la instalación de paneles solares en 300 edificios públicos del Distrito.
El proyecto que trabaja la Alcaldía Distrital y Alumbrado Público de Barranquilla (APBAQ) contempla la instalación en las cubiertas de las edificaciones de paneles solares, suministrando energía verde a hospitales, PASOs y CAMINOs, escenarios deportivos, mercados, centros de atención para la seguridad ciudadana, CAI, entre otros, que contarán con sistemas fotovoltaicos que se componen de módulos solares, inversores, cableado eléctrico, protecciones eléctricas, estructura de soporte y medidores bidireccionales, y que cuentan con todas las certificaciones exigidas por la normatividad vigente.
El proyecto, que tendrá una vigencia de 25 años, permitirá ahorros en la facturación, la generación de 500 empleos verdes y la reducción de 23.000 toneladas de gases de efecto invernadero.
Es sabido que Barranquilla ha emprendido un camino para convertirse en una Biodiverciudad, lo cual incluye —además de bosques urbanos, promoción de hábitos y estilos de vida saludables, entre otros aspectos—, la generación de energías limpias, para lo cual trabaja de la mano de Hecate Energy, empresa que pondrá en marcha esta iniciativa en la capital del Atlántico, asociándose con APBAQ.
La Alcaldía Distrital, a través de Alumbrado Público, planea la instalación en las cubiertas de las edificaciones de 70.000 paneles solares que transformarán la energía proveniente del sol en electricidad, suministrando energía verde a más de 300 edificios públicos.
Desde 2018, Barranquilla se ha venido posicionando como la capital energética de Colombia, al ingresar al selecto grupo de urbes que hacen parte de la Asociación Mundial de Ciudades Energéticas (WECP, por su sigla en inglés), siendo la única de Latinoamérica en hacer parte de esta organización internacional. Esto debido al potencial del territorio, ya que cuenta con yacimientos en tierra y costa afuera de gas natural, radiación ideal para albergar proyectos solares y ubicación privilegiada por sus vientos alisios que permitirán la generación eólica para usos industriales.
Asimismo, la capital del Atlántico fue la primera ciudad del país en formar parte del Consejo Mundial de Energía Colombia (World Energy Council, —WEC), organismo con más de 100 años de historia y capítulos en más de 70 países alrededor del mundo.
Algunos de los ejes clave para su oficialización en ambas entidades son precisamente la política de Biodiverciudad y la creación de la empresa pública de energías renovables, además del liderazgo que ha asumido de cara al proceso de transición energética de la región y del país.