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Niños disfrazados con la boca abierta.

Barranquilla, una ciudad rica en diversidad étnica y cultural

Históricamente, Barranquilla ha sido una ciudad que ha recibido a muchas culturas desde sus inicios.

 

Este 12 de octubre se celebra el Día de la Raza o de la Diversidad Étnica y Cultural, como se denomina actualmente en Colombia, cuya fecha fue establecida como un recordatorio del 12 de octubre de 1492, fecha en la que Cristóbal Colón llegó a América y comenzó esta mezcla multicultural.

Colombia es una muestra de esa diversidad étnica y cultural y lo podemos encontrar en todas las ciudades de nuestro país. Barranquilla es un claro ejemplo de esto ya que históricamente, al ser una ciudad portuaria, ha recibido a muchos extranjeros a lo largo de los años que han traído sus costumbres, gastronomía y hasta muestras folclóricas, como se evidencia en nuestro Carnaval, la cual es una fiesta triétnica con raíces españolas, indígenas y africanas. La danza de micos, el congo y el paleteo son tres danzas que nos lo demuestran.

En la capital del Atlántico encontramos que más del 5% de los ciudadanos (cerca de 60 mil personas) se auto reconocen como miembros de un grupo étnico, siendo los afrocolombianos, afrodescendientes, negros y mulatos el mayor grupo. Sin embargo, en nuestro territorio también encontramos indígenas, gitanos o romaníes, raizal y palenqueros. Así mismo, hay alrededor de 6,000 personas que profesan la religión musulmana y 1,000 la judía (15% de todo el país).

Es que desde sus inicios Barranquilla demostró que sería un lugar multiculural. Cuando surgió en el siglo XVII era “un sitio de libres”, es decir, un poblado en el que podían vivir personas de todos los colores y hacer uso de todos los servicios. Para ese entonces había muchos pueblos de blancos o pueblos de indígenas.

Hoy en día la ciudad cuenta con una de las mejores gastronomías del país gracias a esta mezcla de razas. Encontramos fusiones entre la gastronomía caribeña, europea, africana y árabe, que cautiva a todos los barranquilleros y extranjeros que nos visitan.

La música no se queda atrás. En la ciudad tenemos instrumentos de América, Europa y África, los cuales se mezclan constantemente para incursionar en nuevos ritmos y géneros, poniendo a bailar a todo el que la escuche.

Hoy celebramos a todas esas personas que nos han hecho lo que somos, que han traído un poco de sus raíces y han formado al barranquillero. A todos los que día a día siguen trabajando para que esas raíces se mantengan intactas, que perduren en el tiempo y no comprometan nuestra identidad. Hoy celebramos por todos nosotros.